
De la Inspiración Familiar a la Conservación Amazónica
Desde niña, la vida de Lirio Lima ha estado marcada por una profunda conexión con la naturaleza. Creció en la comunidad de Trinchera – Pando, una población en el corazón de la Amazonía boliviana, donde sus padres fueron pioneros en la conservación de los bosques. Aunque en ese entonces la conciencia ambiental no era tan discutida, su padre se convirtió en un impulsor de la protección de la Amazonía, sentando las bases para que ella heredara ese compromiso.
«Siempre he estado de cerca con la conservación. Desde niña vi cómo mis padres trabajaban por la tierra. Eso quedó grabado en mí, y ahora lo llevo adelante con mi familia», cuenta Lirio.
El retorno a su comunidad, en 2015, después de terminar sus estudios en la ciudad fue el punto de partida para un nuevo desafío: la transformación de los frutos amazónicos. El asaí, el majo, la palma real y la castaña son algunos frutos silvestres que antes solo se consumían en los hogares de la Amazonía, pero hoy se han convertido en productos con valor agregado que generan ingresos para las familias locales.
Con el acompañamiento de Conservación Amazónica – ACEAA a través del proyecto Pando Verde, las asociaciones productivas del Departamento han recibido capacitaciones en contabilidad, buenas prácticas de recolección y uso de equipamientos industriales. Al respecto, Lirio explica que «ahora trabajamos de una manera más organizada y con mejor calidad. Hemos aprendido a manejar los equipos para ofrecer productos que lleguen al mercado con un estándar más alto». Estas acciones aprovechan de manera sostenible los frutos del bosque amazónico, impulsando su conservación y fortaleciendo la economía y el bienestar de las comunidades locales.
Mujeres que Lideran el Cambio
Desde su retorno a Trinchera, uno de los principales aspectos de cambio en la vida de Lirio y en la dinámica de las comunidades está relacionada con la participación, la independencia económica y el empoderamiento de la mujer. Muchas que antes se dedicaban exclusivamente al hogar y a los roles establecidos, hoy también son protagonistas en los emprendimientos productivos.
«El emprendimiento dentro de la comunidad nos ha dado alternativas de trabajo. Antes, muchas mujeres dependían económicamente de sus compañeros de vida. Ahora tenemos nuestra propia economía, y eso nos hace sentir más fuertes», afirma.
Este proceso de empoderamiento no ha sido fácil, pero ha transformado la vida de muchas mujeres. A través de la capacitación y el trabajo en comunidad, han descubierto su capacidad de liderazgo y resiliencia. Ahora participan activamente en la toma de decisiones, defendiendo sus derechos y promoviendo una economía sostenible basada en la conservación del bosque.
Además, para enfrentar los desafíos del mercado, en la comunidad se ha implementado una red de apoyo donde intercambian conocimientos y experiencias, impulsando el crecimiento de los emprendimientos para inspirar también a nuevas generaciones.
«Al cuidar el bosque, también cuidamos nuestra fuente de vida. Es lo que aprendimos de nuestros padres y lo que queremos dejar a las futuras generaciones; ese amor y cariño por el trabajo que se realiza desde nuestros padres y que nosotros continuamos», destaca Lirio.
Un Futuro Sostenible: Conservar para Vivir en la Amazonía
El trabajo de Lirio y de su comunidad demuestra que la conservación y el desarrollo socioeconómico pueden ir de la mano. Sin embargo, cree que queda mucho trabajo por hacer en el tema de concientización ambiental. Al respecto, afirma que “el futuro está en la conservación, en potenciar el trabajo de las comunidades, en trabajar con los frutos amazónicos de una manera más sostenible para poder disfrutar de este aire puro y fresco que tenemos, y los beneficios que nos regala el bosque”.
Los frutos amazónicos, disponibles durante todo el año según su ciclo de fructificación, se han convertido en una alternativa sostenible que complementa la economía basada en los Productos Forestales No Maderables (PFNM). Esto brinda estabilidad a las familias frente a las fluctuaciones del mercado.
A pesar de los desafíos económicos y ambientales -como los efectos del cambio climático- que enfrenta la región, Lirio sueña con una Amazonía en pie, rica y diversa en flora y fauna, donde la conservación sea la norma y no la excepción. Con su esfuerzo, ella no solo está asegurando el bienestar de su familia, sino que también inspira a una nueva generación a proteger los bosques que dan vida a la Amazonía.
Al preguntarle, ¿cómo resumiría el impacto de su labor en la conservación de los bosques y en el aprovechamiento de los frutos amazónicos? Lirio declara asertivamente: «Mujeres que sirven a la naturaleza, ella les servirá a ellas».
* Pando Verde es un programa de Conservación Amazónica – ACEAA que impulsa la conservación de los bosques de Pando a través de un modelo de desarrollo integral y sustentable. Con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Unión Europea y Suecia, la iniciativa promueve el manejo sostenible de Productos Forestales No Maderables (PFNM) como la castaña, el asaí, la palma real y el majo, fortaleciendo la producción y sostenibilidad financiera en 31 comunidades locales y seis asociaciones productoras. Su alcance abarca 240.000 hectáreas, incluyendo cuatro áreas protegidas clave, aplicando herramientas innovadoras para garantizar un equilibrio entre conservación y desarrollo.
