Cámaras trampa: Una mirada sigilosa a la vida silvestre
En lo profundo del exuberante bosque amazónico, a medio metro del suelo o en el dosel que se extiende hacia el cielo, un ojo sigiloso y estático aguarda. Abrazado a un árbol, observa atentamente, esperando el momento oportuno. Entonces, con delicadeza, sin perturbar la fluidez de la vida que lo rodea, realiza la captura en su memoria de un instante de realidad, una que permanece ajeno a la vista común de los habitantes urbanos. Este ojo espía agrega a su colección un vívido destello de la naturaleza. Después, vuelve a su espera paciente y estática, listo para ser despertado nuevamente por la vida, para revelar la realidad inherente de la diversa fauna amazónica. Así es como podríamos describir las «cámaras trampa».
Del otro lado se encuentran nuestros técnicos y especialistas, guiados por los actores locales, quienes son parte fundamental de este proceso; recorriendo grandes distancias, internándose en zonas recónditas de la Amazonía, para instalar las cámaras trampa. Estos ojos electrónicos, son la herramienta de quienes, con la experiencia, audacia y sobre todo impregnados del deseo por conocer las rutinas de las especies, ansían observar y proteger la fauna amazónica con la finalidad de obtener datos fidedignos sobre la conducta, actividad e interacción entre especies. Esta valiosa investigación proporciona una información preciosa para implementar o ajustar estrategias de conservación, además del conocimiento para una toma de decisiones adecuada por las autoridades locales.
Tras un período determinado, los datos se recopilan. Técnicos, especialistas y miembros de la comunidad se reúnen para admirar las imágenes y videos capturados. Los actores locales, con asombro y maravillados por lo que captan sus miradas, identifican barreros, senderos y lugares que han sido visitados una y otra vez, tanto por criaturas majestuosas como el jaguar y el águila harpía, como por otros deslumbrantes habitantes de la selva amazónica. Los niños también se unen a la celebración avistando las maravillas de la Amazonía como si disfrutaran de una película, llenos de emoción y alegría. Estas majestuosas especies de la fauna amazónica inspiran fascinación, especialmente entre aquellos que aún no han tenido la oportunidad de aventurarse en los bosques.
Las cámaras trampa son dispositivos audiovisuales diseñados para capturar a las esquivas y silenciosas especies de vida silvestre. Estas pueden incluir a aquellas que raramente se ven e incluso algunas que se consideraban extintas. Las cámaras permanecen inmóviles y alertas, esperando para registrar a través del «fototrampeo» todos los movimientos que ocurran frente a sus lentes. Esta técnica no invasiva permite identificar a los animales capturados en videos o fotografías y documentar la riqueza de la vida silvestre en los bosques amazónicos de Bolivia. Esto, a su vez, enriquece la investigación científica y contribuye significativamente a la conservación.
Los actores locales y las autoridades resaltan la labor realizada con cámaras trampa, afirmando que las fotografías y videos obtenidos fomentan la conciencia sobre la biodiversidad y su importancia. Estas imágenes no solo proporcionan registros más precisos de presencia y abundancia de varias especies, sino que también influyen en la gestión de diferentes unidades territoriales, particularmente en áreas protegidas. Al documentar la vida silvestre en su hábitat natural, se genera información para estrategias de conservación específicas, pero también estas imágenes y videos generan sensibilización para poblaciones locales, así como para una audiencia más amplia en ciudades alejadas de los bosques amazónicos.
Consideramos que, en nuestra labor como Conservación Amazónica–ACEAA, el fototrampeo desempeña un rol muy importante, con más de 700 cámaras que fueron instaladas en alrededor de 642 estaciones con una distancia promedio de 1,5 kilómetros, entre cada una. Desde 2015 hasta 2022, este esfuerzo ha generado una importante base de datos, que incluye el registro de 44 especies de mamíferos medianos y grandes identificadas en miles de videos y fotografías dentro de áreas protegidas del nivel municipal, departamental y nacional del Departamento de Pando y en territorios indígenas del Norte de La Paz.
A lo largo de diversas etapas en la ejecución de actividades de fototrampeo, se han obtenido resultados significativos, como los obtenidos en las campañas de fototrampeo (2017-2019) en el Área Modelo de Manejo Integral del Bosque de Santa Rosa del Abuná (AMISRA) en Pando. Durante esta campaña, se identificaron 30 especies de mamíferos y 8 especies de aves, incluyendo 3 especies prioritarias para monitoreo continuo: el tapir (Tapirus terrestris), el jaguar (Panthera onca) y el chancho de tropa (Tayassu pecari). Estos resultados subrayan el buen estado de conservación del área y la salud de sus bosques.
El uso de cámaras trampa se ha convertido en un recurso importante para la investigación, la observación y la generación de empatía hacia las especies que habitan los ecosistemas amazónicos de Bolivia. Este enfoque refuerza la misión de Conservación Amazónica–ACEAA de conservar los ecosistemas y manejar la biodiversidad de manera sostenible. Al presentar una nueva perspectiva sobre la vida silvestre capturando la belleza de la fauna local, estas cámaras permiten generar conciencia en la población y contribuyen significativamente a investigaciones científicas que exploran patrones de comportamiento, hábitats y relaciones ecológicas en los bosques amazónicos de Bolivia.
